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The Elder Scrolls Online: primeras impresiones
Hace poco tuve la oportunidad de entrar en la Beta de The Elder Scrolls online durante un fin de semana. Lamentablemente no tuve demasiado tiempo para probarlo pero aquí están mis experiencias.
No voy a meterme demasiado en la historia, porque considero que estos juegos de rol son (casi) tan narrativos como un libro.
Creación de personaje y primer misión
Aunque el juego posee bastantes controles y variantes para crear personajes, sinceramente es difícil que alguno se vea realmente bien. Comparado con otros juegos como Guild Wars 2 (para obviar otros como Tera cuyos personajes se pasan de belleza) el diseño de personajes es burdo, y muchas veces pareciera que no se refleja del todo lo que uno diseña y el resultado final in-game. Por ejemplo, cuando quise crear una elfa, al jugar con ella la vi extremadamente flaca, y no la veía así cuando la diseñé.
Podemos crear personajes de nueve razas diferentes, divididas en 3 facciones enfrentadas:
- Daggerfall Covenant: formada por las tres razas del noroeste de Tambriel: Breton, Redguard y Orc.
- Ebonheart Pact: extraña alianza formada por tres razas que históricamente siempre se llevaron mal: Nord, Dark Elf y Argotian
- Aldmeri Dominion: High Elf, Wood Elf y Khajiit
Cada raza tiene sus habilidades y beneficios propios, lo cual conviene tener en cuenta a la hora de elegir la clase que vamos a jugar. Para los que no saben mucho de la cosa, los jugadores de cada facción podrán asesinar a otros jugadores de las otras alianzas cuando se encuentren con ellos. Lamentablemente mi experiencia no llegó tan lejos.
Llega el momento de elegir clase... y aquí es donde me quedo mirando la pantalla bastante extrañado. Tenía la intención de crear un personaje del tipo cazador/ranger o como quieran llamar a alguien que usa arco y flecha como arma principal... y no encontré esa opción... si bien las clases en TESO no son tan estrictas como en otros juegos y es posible crear un personaje casi a nuestro antojo, quedé muy confundido con las opciones.
- Templar: armadura pesada, arma a dos manos, poderes de protección/curación de la luz
- Dragon Knight: mezcla de guerrero y mago ofensivo
- Sorcerer: hechizos de daño y curación, puede convocar criaturas a su servicio
- Nightblade: el típico asesino con una daga en cada mano
¿Dónde están el guerrero puro y el cazador? Gran pregunta. Al parecer hay que elegir la clase más parecida y descuidar completamente aquellas habilidades que no cuadran en nuestra idea de clase... lo cual es como un desperdicio. No quedé conforme con esto.
Una vez creado el personaje, nos encontramos en una prisión (típico de la saga), pero en Oblivion (el universo de los demonios/daedra) y sin alma. Alguien nos ayudará a salir de la celda y escapar al mundo real. En el camino, se aprende lo básico del juego, combate, intentario, loot, etc.
Esta primer secuencia puede pasarse en 5 o 10 minutos, pero yo tardé 30 cuando la hice por primera vez. El motivo es simple: el lugar está plagado de vasijas y cofres que uno puede abrir. Todos tienen items poco útiles (algunas recetas de cocina, algunos materiales, un poco de oro y con suerte algún objeto igual en poder al que ya tenemos equipado). En eso me recordó a Skyrim y sus predecesores, pero en un MMORPG me parece que semejante cantidad de cosas para abrir es un despropósito, en especial para looteadores crónicos como yo.
Combate y drop/loot
El combate es bastante normal o aceptable, pero nada del otro mundo. Una mezcla entre el combate de la saga y el de un MMORPG. No cierra del todo, pero hace su trabajo. Donde me sentí totalmente descorazonado es en el drop, es decir, lo que se obtiene al asesinar algo. El drop es el más pobre de todos los juegos que jugué en mi vida. El 99% de los humanoides que matemos nos va a dar solo una moneda de oro (aquí todo es oro, no hay plata ni cobre) y otras criaturas solo sueltan materiales de cocina, carnada para pezca o pieles para fabricar armaduras de cuero. En ningún momento vi que me tocara algún objeto útil. Terminé por pasar de largo todo bicho hostil que no fuera específico para la misión y vi que la mayoría terminaba haciendo lo mismo. Matar no da otra recompensa más que la experiencia... y si pensamos que un MMORPG tiene como uno de sus pilares matar... vamos mal.
Mundo, misiones y crafteo
El mundo es bello, pero estéticamente no parece un Elder Scrolls salvo cuando se entra en alguna catacumba... aunque la luz parece inundarlo todo. Sentí una total falta de un toque dark en el juego. Además vi atardeceres, pero nunca cayó la noche. Eso es extraño.
Las misiones te invitan a explorar, y al ir de un lado al otro encontramos otras misiones que no figuran en el mapa (un mapa muy feo que parece de un juego de hace 10 años... o más, los mapas del WoW son 100 veces más lindos).
Juntar recursos se asemeja mucho a la saga, con la excepción que el pico de minería ya lo tenemos incorporado y no ocupa lugar en nuestra mochila de 50 espacios. Muy espaciosa la mochila, es verdad, pero hay muchos elementos que deberían poder apilarse (usando un solo espacio) y eso no sucede. Si se dedican a cocinar, pronto van a ver que su mochila se llena en pocos minutos.
La fabricación de armas y armaduras me resultó interesante, sobre todo porque los objetos pueden ir mejorándose y porque su estética se define mediante el añadido de un material que representa a cada raza. Estos materiales pueden lootearse (con algo de suerte) o comprarlos al vendedor en la estación de fabricación. Si tenemos en cuenta la cantidad de razas que hay en el juego y que por cada armadura de cada nivel podemos elegir entre 9 estéticas o combinarlas, hay que estar contentos. Eso sí, una armadura Nord de nivel 1 es igual a la de nivel 4, y no se en qué nivel cambia de apariencia, así que todo tiene su lado negativo.
Conclusión: helado sabor pizza
Me encanta el helado y me encanta comer pizza. Pero si quiero hacer un helado de pizza el resultado le va a parecer poco apetitoso a la mayoría. Eso es la sensación que me deja The Elder Scrolls Online. Tiene una mezcla de elementos de MMORPG y de la saga single player, pero la combinación no ha salido bien. En vez de sentir que se tiene lo mejor de ambos mundos, se extraña lo que se dejó de lado. El gran ejemplo vuelve a ser el loot. En los juegos originales uno al matar un guerrero puede quedarse con todo lo que tiene equipado (y no con un objeto random como en la mayoría de los juegos)... y aquí tenemos un loot que es pobre comparado no ya con un RPG sino con cualquier juego multijugador masivo... TESO es un híbrido deforme, con muchas cosas interesantes pero que encajan mal entre sí. Con un par de ajustes, sería un buen Free to Play, pero por ningún motivo pagaría por mes para jugarlo. Una lástima.
En estos momentos estoy probando Wildstar, y aunque he firmado confidencialidad, puedo decir que la diferencia entre un juego mal hecho y uno bien hecho se siente.
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